¿10 blanqueadas en una temporada?
Bienvenido Rojas
“Poncio Pilato fue quien nos enseñó a lavarnos las manos, aún cuando no existía entonces el Covid-19”. Joseph McKabew
En el campo del pitcheo en las Grandes Ligas hay una serie de renglones que poco a poquito están pasando a la categoría de “muelas de gallina”: Los juegos completos, los 300 ponches, 300 innings y las blanqueadas de dos dígitos en una temporada son cosas del pasado.
Es muy difícil, casi imposible encontrar en las estadísticas un pitcher logrando dígitos dobles en blanqueadas. Los lideratos de dos dígitos de un solo lanzador solían ser algo que sucedía una o dos veces por década, pero se ha convertido en una de esas cosas que ahora parecerían extrañas hasta el punto de ser sobrehumanas. No ha sucedido desde 1985, cuando el zurdo de los Cardenales, John Tudor, lanzó 10 blanqueadas, liderando la liga en esa categoría en su camino a una temporada de 21-8 y una efectividad de 1.93. El WHIP de Tudor ese año fue 0.938, que también lideró la liga. A pesar de su temporada estelar, Tudor terminó segundo en la votación del Cy Young ante Dwight Gooden (24-4; 1.53 de efectividad; 268 ponches; ocho blanqueadas).
Ningún serpentinero ha lanzado más de ocho blanqueadas desde 1985, y eso ocurrió por última vez en 1989. Incluso el súper estelar Clayton Kershaw nunca lanzó más de tres en el 2016 y 2016. Además, los lanzadores modernos no lanzan suficientes entradas. Tudor lanzó 275 innings en 1985 y tuvo 14 juegos completos, se colocó en posición de asegurar una gran cantidad de blanqueadas.
En la década del 70 era normal que un lanzador facturara 300 innings en una estación. Por ejemplo, el líder de la Liga Nacional en entradas lanzadas superó la marca de 300, 25 veces desde 1950 hasta 1980. Ocurrió 12 veces en la Liga Americana durante el mismo período. De hecho, algunos lanzadores terminaron más cerca de 400 entradas que de 300. Wilbur Wood, de los White Sox, lanzó 376.2 entradas en 1972 en su camino a un récord de 24-17. Nadie ha igualado ese total de entradas en 43 años.
Por qué no volverá a suceder: los recuentos de los pitcheos, los límites de entradas y la rareza general de los problemas de salud en la filosofía moderna del pitcheo han hecho que incluso una temporada de 200 entradas sea algo para considerar un logro.
Ningún pitcher ha lanzado 300 entradas desde que Steve Carlton lo hizo para los Filis en 1980 con 304.0. El lanzador más cercano desde entonces fue Bert Blyleven, quien lanzó 293.2 para los Indios de y los Mellizos en 1985. Salvo un cambio importante en la forma de pensar, es muy poco probable que alguien vuelva a tocar el hito de 300.
Juan Marichal en tres temporadas superó las 300 entradas: 1963, 325.1; 1966, 307.1; 1968, 325.2 y en 1965 logró 10 blanquedas.
En el campo del pitcheo en las Grandes Ligas hay una serie de renglones que poco a poquito están pasando a la categoría de “muelas de gallina”: Los juegos completos, los 300 ponches, 300 innings y las blanqueadas de dos dígitos en una temporada son cosas del pasado.
Es muy difícil, casi imposible encontrar en las estadísticas un pitcher logrando dígitos dobles en blanqueadas. Los lideratos de dos dígitos de un solo lanzador solían ser algo que sucedía una o dos veces por década, pero se ha convertido en una de esas cosas que ahora parecerían extrañas hasta el punto de ser sobrehumanas. No ha sucedido desde 1985, cuando el zurdo de los Cardenales, John Tudor, lanzó 10 blanqueadas, liderando la liga en esa categoría en su camino a una temporada de 21-8 y una efectividad de 1.93. El WHIP de Tudor ese año fue 0.938, que también lideró la liga. A pesar de su temporada estelar, Tudor terminó segundo en la votación del Cy Young ante Dwight Gooden (24-4; 1.53 de efectividad; 268 ponches; ocho blanqueadas).
Ningún serpentinero ha lanzado más de ocho blanqueadas desde 1985, y eso ocurrió por última vez en 1989. Incluso el súper estelar Clayton Kershaw nunca lanzó más de tres en el 2016 y 2016. Además, los lanzadores modernos no lanzan suficientes entradas. Tudor lanzó 275 innings en 1985 y tuvo 14 juegos completos, se colocó en posición de asegurar una gran cantidad de blanqueadas.
En la década del 70 era normal que un lanzador facturara 300 innings en una estación. Por ejemplo, el líder de la Liga Nacional en entradas lanzadas superó la marca de 300, 25 veces desde 1950 hasta 1980. Ocurrió 12 veces en la Liga Americana durante el mismo período. De hecho, algunos lanzadores terminaron más cerca de 400 entradas que de 300. Wilbur Wood, de los White Sox, lanzó 376.2 entradas en 1972 en su camino a un récord de 24-17. Nadie ha igualado ese total de entradas en 43 años.
Por qué no volverá a suceder: los recuentos de los pitcheos, los límites de entradas y la rareza general de los problemas de salud en la filosofía moderna del pitcheo han hecho que incluso una temporada de 200 entradas sea algo para considerar un logro.
Ningún pitcher ha lanzado 300 entradas desde que Steve Carlton lo hizo para los Filis en 1980 con 304.0. El lanzador más cercano desde entonces fue Bert Blyleven, quien lanzó 293.2 para los Indios de y los Mellizos en 1985. Salvo un cambio importante en la forma de pensar, es muy poco probable que alguien vuelva a tocar el hito de 300.
Juan Marichal en tres temporadas superó las 300 entradas: 1963, 325.1; 1966, 307.1; 1968, 325.2 y en 1965 logró 10 blanquedas.
Pedro Martínez el máximo de innngs que apuntaló en una campaña fue de 241.1 en 1997 y en dos ocasiones su mayor cantidad de blanqueadas fueron 4.
LOS FAVORITOS DE HOY: San Luis (J. Flaherty 2.0), San Diego (J. Musgrove 2-1), White Sox (L. Giolitto 1-0), Dodgers, (D. May 1-0).
UN DÍA COMO HOY: 1986 - El lanzador de los Atléticos de Oakland, José Rijo, establece un récord de club con 16 ponches en ocho entradas mientras Oakland vence a los Marineros de Seattle, 7-2. Los dos clubes se combinan para 30 ponches en total, estableciendo el récord moderno de Grandes Ligas para un juego de nueve entradas.
2005 - Los Mets de Nueva York establecen un récord del club de más jonrones conectados en un juego con siete. En Citizens Bank Park, los Mets van profundo con José Reyes (2), Víctor Díaz (2) David Wright (grand slam), Mike Piazza y Doug Mientkiewicz conectando mientras derrotan a los Filis, 16 - 4.
Bienvenido RojasCronista deportivo. Amante del béisbol y sus vivencias.
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