La Ludopatía de los jugadores de MLB

La Ludopatía es una enfermedad que se caracteriza por un fracaso crónico y progresivo en resistir los impulsos de jugar apostando dinero.

Guardando la distancia de los jugadores en los Casinos, en las Bancas de Loterías en nuestro país da gusto ver a cientos de personas arreglando sueños para tratar de hacerle diana a la suerte realizando hasta 10 palés de $10 pesos. Y de ñapa en las redes hay cientos de numerólogos dando orejas del 1 al 100, por lo tanto no hay fallos en sus predicciones.

Pero vamos al béisbol, cuando Shoeless (El Descalso) Joe Jackson, de los Medias Blancas de Chicago, supuestamente confesó y luego fue acusado de conspirar con varios compañeros de equipo para organizar la Serie Mundial de 1919 en connivencia con otros jugadores, hay una historia apócrifa de un niño en las afueras del tribunal que le suplicó a su héroe: "Di No es así, Joe.

Shoeless Joe negó que esto hubiera sucedido mientras protestaba por su inocencia, al igual que Shohei Ohtani después de la noticia de que el mejor jugador de béisbol, posiblemente el atleta más venerado y admirado del planeta, estaba involucrado en un escándalo de apuestas focalizado en su intérprete y amigo, Ippei Mizuhara.

En las Grandes Ligas la lista de jugadores que han sido noticias por escándalos de apuestas a lo largo de los años es tan larga como la cola del cometa Hanley y en ese catálogo, para citar algunos casos están Shawn Chacon, Paul LoDuca, Lenny Dykstra, Yasiel Puig y el más perverso de todos: Pete Rose.

Las reglas de la MLB con respecto a la participación de los jugadores en las apuestas deportivas son claras y precisas:

(1) Cualquier jugador, árbitro, funcionario o empleado del Club o Liga que apueste cualquier suma en cualquier juego de béisbol en relación con el cual el apostador tiene el deber de realizar, será declarado permanentemente inelegible.

(2) Cualquier jugador, árbitro, funcionario o empleado del Club o Liga que realice apuestas con casas de apuestas ilegales, o agentes de casas de apuestas ilegales, estará sujeto a la sanción que el Comisionado considere

apropiada a la luz de los hechos y circunstancias del caso.

Las sanciones son drásticas y en el peor de los casos, Shohei Ohtani podría finalmente ser declarado culpable de apuestas deportivas ilegales y expulsado del béisbol para siempre. En caso de ser liberado, de cualquier delito y declarado víctima inocente de un amigo desesperado y equivocado, su legado quedará manchado, ahogado en el océano de las dudas.

Bienvenido Rojas

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Cronista deportivo. Amante del béisbol y sus vivencias.