Amanda Seyfried, Halle Berry, Carey Mulligan y Regina King, las más elegantes de los Óscar
En el atípico año de la 93 edición de los Óscar, la alfombra roja, elemento básico de la ceremonia, ha sido breve, pero intensa en la que han sobresalido los vestidazos de Amanda Seyfried, Carey Mulligan, Laura Pausini, Halle Berry o Regina King
EFE
Amanda Seyfried, nominada a la mejor actriz de reparto por su papel en “Mank”, ha sido la actriz más elegante con un vestido rojo con cientos de capas de tul rojo coral con cuerpo corsé y voluminosa falda, una creación de Armani con la que ha cumplido con creces la petición de la Academia de dar glamour a la alfombra roja.
Con un toque de fantasía y sofisticación, Regina King ocupa un segundo lugar tras pisar la alfombra roja con un vestido azul metalizado, de corte sirena con falda recta, escote en pico, con líneas verticales de pedrería y originales mangas mariposa. Una pieza favorecedora que iba adornada con 4,000 piedras de cristal y 62.000 lentejuelas, para el que se emplearon 140 horas de trabajo, firmado por Louis Vuitton.
La medalla de bronce de la elegancia es para Carey Mulligan, quien llenó de luz la pasarela de Hollywood con un vestido de lentejuelas doradas, compuesto por un top sin mangas y una fabulosa falda de talle alto, con mucho volumen. Un diseño de Valentino con el que la actriz lució abdomen, una tendencia que ha triunfado en los Óscar.
Tras ellas, Zendaya, quiso lucir abdominales y arriesgó con un diseño amarillo flúor firmado por Valentino alta costura, un estilismo que completó con una impresionante gargantilla y un llamativo collar de Bulgari.
Otra de las actrices que arriesgó con las aperturas debajo del pecho fue Vanessa Kirby, nominada por su trabajo en “Pieces of a Woman”, que lució un vestido rosa palo con escote corazón y falda recta rematada con una cola, de Gucci.
Nominada a mejor actriz de Reparto por “Borat Subsequent Moviefilm”, María Bakalova también lució abdomen con un Louis Vuitton de escote en uve y falda plisada de tul.
Andra Day se sumó a esta moda de lucir el abdomen con un vestido dorado de largo asimétrico de Vera Wang y Viola Davis, nominada a mejor actriz por “Ma Rainey’s Black Bottom”, jugo con sofisticados cortes desde el pecho hasta el abdomen con una creación blanca de Alexander McQueen.
Entre las más elegantes: Reese Witherspoon que mostró un vestido estilo griego bicolor -rojo y granate-, de Dior, aderezado con joyas de Bulgari.
Margot Robbie con un diseño de tirantes estampado con flores firmado por Chanel.
También Laura Dern, quien apostó por un diseño blanco y negro con falda de plumas de Oscar de la Renta.
El minimalismo de Laura Pausini y la teatralidad de Angela Bassett
Más contenida estuvo la cantante Laura Pausini, una de las primeras en llegar a la alfombra roja en Union Station de Los Ángeles (EEUU), quien resultó elegante con un diseño minimalista negro de Valentino, una creación que aderezó con fabulosas joyas de Bulgari.
Discreta y muy elegante resultó la veterana Yuh-jung Youn, con una creación impecable azul noche con cuello a la caja, de Dior alta costura, en una alfombra en la que no faltó glamour, grandes diseñadores, pasión y mucho color.
Sin ostentación alguna y haciendo gala de la sencillez, Chloé Zhao, ganadora del Óscar a mejor dirección por “Nomadland” -segunda mujer de la historia en conseguir la estatuilla en esta categoría-, acudió a la gala con un vestido de Hermès y deportivas blancas.
Teatral fue el modelo de Angela Bassett, un vestido rojo con una gran lazada en la espalda y cola, de Alberta Ferretti y joyas de Chopard.
Y roja también fue la apuesta de Olivia Colman, en un vestido de manga larga, de Dior.
Halle Berry lució un vestido palabra de honor de gasa malva con una fabulosa lazada en la cintura, de Dolce&Gabbana.
Y la directora, actriz y guionista Emerald Fennell presumió de embarazo con un vestido de seda en tonos verdes y rosas con volantes y bordados, de Gucci.
No acertó con el estilismo Glenn Close, quien acudió por octava vez como nominada a los Óscar, con un modelo azul añil de Armani Privé, compuesto por pantalón pitillo y vestido con pedrería y guantes a juego.
Los hombres apuestan por el color
En este desfile de diseños de alta costura, esmóquines y joyas que ha tenido lugar en el vestíbulo de la histórica Union Station de Los Ángeles, un escenario decorado con elementos Art Decó y estilo colonial español, llamó la atención Leslie Odom Jr., quien optó por un esmoquin acabado con una pátina de oro de 24 quilates, de Brioni.
Colman Domingo iluminó la alfombra con su esmoquin fucsia de lentejuelas de Atelier Versace.
Lakeith Stanfield con un atrevido y varonil mono de Yves Saint Laurent creado por Vacarello.
El dorado fue igualmente escogido por el director y productor Martin Desmond, quien combinó su esmoquin adamascado con unas zapatillas con las que rindió homenaje a las víctimas negras de violencia policial, al igual que su colega Travon Free.
El actor y cómico Lil Rel Howery se decantó por una chaqueta de terciopelo, pajarita y camisa negra, de Ermenegildo Zegna.
Más tradicional, con esmoquin clásico, asistió a esta gala Brad Pitt, que llevaba el cabello recogido en una coleta.
O los coreanos Steven Yeun y Lee Isaac Chung, o el danés Thomas Vinterberg, que prefirió un modelo en blanco y negro.
El actor más joven de esta edición, Alan S.Kim “Minari”, portó con elegancia un traje de chaqueta, pantalón corto y medias hasta la rodilla, y posó divertido ante los medios a su llegada a Union Station, donde se celebró una gala presencial en la que la mascarilla no fue el complemento de la noche, al menos en la alfombra roja.
Texto: Carmen Martín
EFEFehaciente, fidedigno y fácil. Agencia de noticias multimedia en español.
Continuar con Google